ICONTEC ENTREGA EL CERTIFICADO DE ACREDITACIÓN EN SALUD A LA CORPORACIÓN HOSPITALARIA JUAN CIUDAD (Hospital Universitario Mayor Mederi- Hospital Universitario Barrios Unidos), DE LA CIUDAD DE BOGOTÁ D.C.

​La entrega del certificado se realizó en dos ceremonias: una el 18 de septiembre de 2019 en Centro de Convenciones Ágora y la segunda el 24 de septiembre en las instalaciones del Hospital Universitario Mayor Mederi de la ciudad de Bogotá D.C. Durante los eventos el Doctor Carlos Edgar Rodríguez Hernández realizó una reflexión en torno a la dignidad de la persona, y cómo desde el sentido de la Acreditación se trabaja para su respeto.

​Indicó también que el contenido de requisitos de la Acreditación apunta a asuntos prácticos y precisos y pretende que todos los que conforman la institución estén permanentemente atentos a las necesidades de los pacientes, muy especialmente en los frentes de atención segura y atención humanizada. “En una institución como esta, en la que circula tanta gente y se realizan miles de atenciones todos los días, los pacientes necesitan que los trabajadores de la salud nos percatemos de los riesgos y los intervengamos oportunamente. El verdadero sentido de la acreditación es cumplir con nuestro deber profesional y prestar una atención efectiva guiada por estándares, protocolos y evidencia científica”, afirmó.
También reflexionó en torno a que las exigencias de calidad son propuestas sobre todo metodológicas de apoyo para que la cultura de las organizaciones de salud se transforme en forme permanente y renueve la vocación de servicio de los trabajadores de la salud, evitando que el esquema tenga un carácter punitivo, se pretende más bien la promoción de altos estándares y buenas prácticas y la referenciación de experiencias exitosas. “El mejoramiento no debería lastimar a nadie sino ayudar a todos”.

Destacó las fortalezas institucionales que llevaron al alcance de la distinción partiendo desde el largo trabajo de preparación, reconocimiento valioso dada la complejidad, el número de trabajadores, las dos sedes, el punto de partida, la convergencia de culturas y todas las demás variables institucionales que debieron analizar e intervenir. Resaltó el proceso de transformación permanente que ha vivido la institución y que ha logrado generar una cultura de servicio, y un relacionamiento con partes interesadas que garantiza el cumplimiento sinérgico de los objetivos que se han propuesto.
​“La Junta de Acreditación destacó el rol de la institución como hospital formador, institución que investiga y genera conocimiento y como modelo de gobierno corporativo. La acreditación de esta institución constituye un ejemplo digno para otras instituciones con pasado y características similares. Un detalle que no quiero omitir es la mención de la Junta al liderazgo del Doctor Jaramillo en el que se reconoció inteligencia, compromiso y especialmente carisma”.
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Como última gran reflexión retomó el tema de la dignidad humana, aspecto esencial del esfuerzo permanente por mejorar. Sobre el particular propuso trabajar por el respeto de la dignidad de la persona tanto del paciente como de su familia, y desde luego que se respete la dignidad de los propios colaboradores. “Hay que recordar que la dignidad nadie nos la otorga, que no es mayor por tener más posesiones o poder, o menor por carecer de medios o títulos, o por estar enfermos, saber que todos somos iguales en dignidad es fuente valiosa para actuar con sentido de justicia. El respeto de la dignidad humana es uno de los objetivos más valiosos del Sistema de Acreditación y todos los trabajadores de las instituciones acreditadas, directivos, profesores, profesionales, auxiliares, personal de apoyo, todos debemos dar ejemplo de dicho respeto en la práctica cotidiana”.

Para cerrar su intervención propuso un aplauso de agradecimiento a los líderes y a todos los trabajadores, que han hecho posible el logro, como una contribución digna a los pacientes, a la sociedad en general a la ciudad y al país.​